Beneficios del Contacto con la naturaleza
El estilo de vida moderno y en las ciudades, ha generado un distanciamiento progresivo entre los seres humanos y la naturaleza.
Pasamos gran parte del día en interiores, rodeados de tecnología, aislados de los entornos naturales. Este alejamiento está originando diversos problemas de salud, tanto físicas como emocionales. Sin embargo, para nuestros antepasados era algo natural, normal y parte de la vida diaria, es decir, pasaban la mayor parte tiempo en el campo y al aire libre.
Todos hemos experimentado la sensación de bienestar, tranquilidad y relajación cuando tenemos contacto con la naturaleza, es decir, cuando vamos a la playa o un lugar donde halla abundante vegetación, jardín, arboles, aire puro, etc.
Hoy en día, se está redescubriendo, valorando y cobrando importancia una práctica natural y se le ha llamado como “contacto a tierra”, «grounding» o “earting”, por sus efectos beneficiosos para el bienestar, corroborados en estudios clínicos y estudios científicos.
¿Qué es el contacto a tierra?
El contacto a tierra se refiere a la conexión física directa con la superficie de la Tierra, ya sea caminando descalzo en la arena, la hierba, o sumergiéndose en agua, ya sea en lagunas, playas, etc. Esta práctica se basa en el descubrimiento de que, al estar en contacto con el suelo, nuestro cuerpo absorbe electrones libres, lo que ayuda a neutralizar el exceso de radicales libres en el organismo. Estos electrones tienen propiedades antioxidantes, y su transferencia a nuestro cuerpo contribuye a equilibrar las cargas eléctricas y reducir la inflamación, promoviendo así la salud general.
Beneficios para la salud
En Japón, por ejemplo, utilizan la “bosque terapia”, para ayudar en la recuperación de los enfermos. Diversos estudios han señalado que el contacto directo con la tierra o la naturaleza ofrece una serie de beneficios para la salud física y mental. Entre ellos, destacan los siguientes:
- Reducción del estrés.Vivimos en un mundo que fomenta un estado constante de estrés. Las investigaciones han mostrado que el contacto con la tierra reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés, promoviendo un estado de calma y relajación. Las personas que practican grounding regularmente experimentan una disminución significativa en los síntomas de ansiedad y depresión.
- Mejora del sueño. Las alteraciones en el ritmo circadiano, a menudo causadas por el uso de dispositivos electrónicos, afectan la calidad del sueño. El contacto a tierra ha demostrado ser efectivo para regular el sueño al ayudar a sincronizar los ritmos biológicos con los ciclos naturales del planeta, lo que mejora el descanso y contribuye a una sensación general de bienestar.
- Disminución de la inflamación. La inflamación crónica está relacionada con muchas enfermedades modernas, como la artritis, las enfermedades cardíacas y las enfermedades autoinmunes. El contacto con la tierra puede reducir la inflamación al neutralizar los radicales libres, lo que también favorece una recuperación más rápida tras el ejercicio o lesiones.
- Aumento de la energía. Al equilibrar las cargas eléctricas del cuerpo y mejorar la circulación, las personas reportan un aumento en su nivel de energía y vitalidad tras exponerse al grounding. Esto podría estar relacionado con una mejor oxigenación de las células y la reducción del estrés oxidativo.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico. Al reducir el estrés y la inflamación, el contacto a tierra también puede tener un efecto positivo en la función inmunológica, mejorando la capacidad del cuerpo para combatir infecciones y enfermedades, ayuda en la depresión y ansiedad.
Además de le mejorar de la circulación sanguínea, regula la presión arterial, tranquiliza el sistema nervioso excitado, mejora el estreñimiento, ayuda en la coagulación de la sangre, aumenta la desintoxicación del hígado, reduce la glucosa en los diabéticos, protege los riñones, mejora la diabetes, mejora la función de la tiroides, entre otros beneficios.
¿Cómo practicar el contacto a tierra?
La buena noticia es que el contacto a tierra es gratis, fácil de incorporar a la vida diaria y no requiere equipo especial. Aquí te dejamos algunas formas sencillas de practicarlo:
- Camina descalzo: Pasear por el pasto, la arena o la tierra es una de las formas más efectivas de conectarse a la tierra.
- Sumérgete en la naturaleza: Si tienes acceso a un río, lago o el mar, nadar o simplemente sumérgete en sus aguas. Los cuerpos de agua naturales también facilitan la absorción de electrones.
- Toma descansos al aire libre: Sal de tu oficina o casa durante unos minutos cada día y siéntate o recuéstate en un parque. El simple contacto con el suelo ya tiene beneficios.
- Uso de herramientas de grounding: Existen alfombras, sábanas, calzados, especializado que permite que, incluso dentro de casa o en la ciudad, puedas conectarte a la tierra.
- Uso de herramientas que simulan dentro del hogar los beneficios del contacto a tierra: Plantillas, Colchones saludables, Pulseras.
- Puedes tocar o abrazar un árbol, como el árbol está en contacto y conexión a tierra, los electrones fluyen de esa conexión por tus manos y cuerpo y se logra el mismo beneficio natural.
Recuerda que esta práctica era algo natural, tiempo atrás, antes de que la industria y la modernidad cambiaran nuestros hábitos de vida. Practicarlo no implica misticismo alguno.
En un mundo cada vez más desconectado de la naturaleza, el contacto a tierra ofrece una manera simple y gratuita de recuperar el equilibrio y promover la salud. Ya sea caminando descalzo por el parque o sumergiéndote en el mar, dedicar tiempo para conectar con la tierra puede tener un impacto profundo en tu bienestar físico y emocional, además de contribuir en la recuperación de enfermedades. Haz del grounding una parte de tu rutina diaria 15 o 20 minutos y experimenta sus beneficios para vivir una vida más saludable y equilibrada.
Puede revisar un video muy bien explicado por el especialista en obesidad metabolismo Frank Suarez.
Fuentes