Cada vez hay más estudios científicos que demuestran la relación que existe entre el sueño y el estado de salud, inclusive considerándose en el mismo nivel a la importancia de una buena alimentación sana y natural.
Durante el día, cuando estamos despiertos, el cuerpo realiza muchas funciones que consumen energía y desgastan los órganos. Por el contrario, de noche, cuando dormimos, nuestro cuerpo entra a un taller, por así decirlo, un taller de reparación física y restauración mental y emocional, reparando todo lo gastado durante el día y consolidando todo el aprendizaje del día a nivel cognitivo.
Muchas personas por falta de conocimiento, no dan importancia al sueño, hasta el punto que quieren dormir menos, creyendo que pueden ser más productivos y hacer más cosas, pero este razonar es peligroso y realmente lo que están haciendo es atentar contra su propia vida.
Dormimos o deberíamos dormir aproximadamente 8 horas diarias, un tercio del día, es decir, una persona de 60 años, pasa durmiendo 20 años de su vida, los restantes 40 años hace sus actividades diarias.
Suceden muchas funciones al dormir: el proceso de reparación de los órganos vitales, las glándulas, los músculos, el sistema digestivo, respiratorio, etc., necesitan descanso, para reparar del desgaste, producto del trabajo en el día; el proceso de desintoxicación de los desechos, producto del metabolismo de las células, el hígado, el riñón, la piel y los pulmones, desintoxicación de tóxicos del cerebro por el sistema glinfático; el sistema inmunológico se fortalece e incrementa su actividad, las funciones cerebrales como: la memoria y la capacidad para pensar o razonar se renuevan; el proceso de curación, recuperación y sanación de los órganos afectados o enfermos, etc.
Cuando no dormimos lo suficiente o no dormimos bien, es decir, cuando no tenemos un sueño profundo, descansado y reparador, según las investigaciones, se ha encontrado: un sistema inmune débil, un cuerpo que no elimina toxinas y no desintoxica bien, cansancio generalizado, aumento en el riesgo de cáncer, hipertensión, obesidad, grasa en el abdomen diabetes, enfermedades del corazón, Alzheimer, perdida del deseo sexual, perdida de la memoria, ansiedad, depresión, irritabilidad, problemas de atención, concentración, alteración de las hormonas de crecimiento y saciedad, aumento del estrés, poca productividad en el trabajo, si se padece alguna enfermedad tienen poca probabilidad que se restablezcan, la expectativa de vida se reduce, alteración del ritmo circadiano, alteración de los genes y podríamos seguir enumerando más alteraciones.
Por tanto, las horas de sueño y descanso en la noche son muy importantes para la recuperación del cuerpo y la salud en general. Cuando uno tiene un sueño deficiente, la calidad de vida se deteriora y se vive poco.
¿Cuántas horas se debe dormir? Los niños de 5 años aproximado 11 horas, los adolescentes aproximado 9 horas, el 90% adultos aprox. 8 horas, el 5% de adultos 6 horas y otro 5% de adultos 9 horas.
Para disfrutar de un sueño profundo y reparador, no dormir a altas horas de la noche, se recomienda acostarse no más de las 10-11 pm, no cenar más de las cinco o seis de la tarde, no uso de celulares o pantallas de televisión o laptops dos horas antes de acostarse, desconectarse del mundo laboral y que el cuarto este totalmente oscuro.
Si está en sus posibilidades, le ayudaría a su salud, tener un sistema de descanso de calidad, similar al entorno que nos proporciona la naturaleza, que le permita disfrutar de un sueño descansado, profundo y reparador.
Fuente
- Doctor Estivill, Medicina del Sueño, Doctor del Sueño: 5 Errores que TODOS Cometemos al Dormir
- Doctor Eric J. Olson, M.D. La Clínica Mayo,
- Doctor Oswaldo Restrepo
- Doctor Marco Albuja. Medicina del Estilo de Vida
- Frank Suarez. Especialista en obesidad y Metabolismo.
- Doctor Carlos Jaramillo. Medicina Funcional.